¿Sueñas con abrir tu primer restaurante? Emprender en el mundo de la gastronomía te ofrece oportunidades infinitas. Sin embargo, si no tienes experiencia en el rubro, podría ser una actividad bastante desafiante. No te preocupes, en este blog te diremos cómo abrir tu primer restaurante paso a paso en Bolivia.
Para prosperar en la industria culinaria no solo necesitas comida deliciosa, sino un conjunto de conocimientos que ponemos a tu consideración si deseas invertir en el rubro y comerte el mundo con tu negocio.
Antes de comenzar, recuerda que este contenido sólo tiene fines informativos. Si buscas asesoramiento legal, contable, fiscal, de recursos humanos u otro tipo de asesoramiento profesional, lo mejor es que hables con un abogado, un contador o un asesor de restaurantes.
1. Elige un nicho de mercado y comienza a investigar
El primer paso para abrir cualquier negocio es preguntarse: ¿para quién es lo que estoy creando? Recuerda que no puedes complacer a todo mundo. Elegir un nicho desde el inicio te ayudará a definir el concepto del restaurante, el menú, los precios y la ubicación de manera más fácil. Además, es una estrategia muy rentable.
En este caso, piensa: ¿qué tipo de persona ves comiendo en tu restaurante? Quizás sean personas vegetarianas. Quizás sean amantes de la carne. Quizás sean fanáticos de la comida nacional o prefieran la cocina internacional. Incluso puedes elegir un nicho entre los turistas que visitan tu ciudad. En fin, entiendes el punto.
Sin embargo, debes ser aún más específico/a. Por ejemplo, analiza en qué horarios es más probable que esas personas vayan a tu restaurante, qué zonas de tu ciudad frecuentan, cuál es el rango de precios que aceptan y con qué otras personas van a ir (familia, amigos, pareja, colegas, etc).
En cuanto definas un nicho, identificarás otros restaurantes con un segmento o nicho similar al tuyo. Un buen consejo es visitar esos lugares y probar su menú. Esta es la mejor manera de investigar qué opciones hay, cuáles son sus fortalezas y debilidades y qué vacíos podrías llenar.
2. Crea un concepto y marca de restaurante
En base al nicho de mercado, elegir el concepto de tu restaurante es la parte divertida del proceso de planificación. Es importante que tengas claro si, por ejemplo, vas a abrir un restaurante tipo gourmet de comida fina, uno familiar, uno de comida rápida, etc.
El concepto será parte de todos los aspectos de tu negocio, desde la comida hasta el estilo de servicio al cliente. Tu concepto también debe reflejarse en el nombre del restaurante, la línea gráfica, la decoración y la vestimenta del personal.
¿Cómo defines un concepto? Necesitas pensar por qué te gustaría que tu restaurante sea conocido. Aquí te dejamos algunos ejemplos de conceptos de restaurantes bolivianos para despertar tu creatividad: Cochabamba: Menta Restobar tiene un concepto saludable y amigable con el planeta. Su menú está compuesto de hamburguesas, ensaladas y platos típicos con un giro vegetariano o vegano. Santa Cruz: El Arriero tiene un concepto de churrasquería y es el lugar favorito de los amantes de la carne a la parrilla. La Paz: La Rufina tiene un concepto de comida rápida hecha de forma artesanal que le rinde tributo a la comida callejera de Bolivia.
La marca de un restaurante es más específica y te permite comunicar tu misión e identidad al público. El nombre, el logotipo y el diseño del menú de tu restaurante deben presentar una imagen cohesiva de tu marca. Los canales publicitarios que utilices también deben estar alineados con la identidad de tu marca.
3. Crea un menú reducido
El menú es la pieza central de tu restaurante y debe reflejar tu nicho, concepto y marca. Elegir qué platos y bebidas incluir es la mejor parte para cualquier amante de la comida, pero debes tomar tus decisiones con cuidado. Tu menú dictará el tipo de equipo que necesitarás y las habilidades que debes buscar en tu personal.
Muchos emprendedores bolivianos empiezan con un menú pequeño porque no sólo les permite ahorrar en costos de operación, sino que les permite perfeccionar su menú en poco tiempo. Ya más adelante, a medida que empieza a crecer el negocio, van creando nuevos platos, pero siempre manteniendo su concepto.
Una buena manera de innovar y diferenciarte de otros restaurantes es proponer nuevas combinaciones o pensar en cómo resaltar ciertos sabores. Por ejemplo, si estás vendiendo barbacoa, ¿cómo puedes hacer que tus costillas sean diferentes de otro concepto de barbacoa local?
Por último, debes fijar los precios. Aquí es donde entran en juego el costo de los ingredientes, los costos operativos, los márgenes de ganancia, el pronóstico de ventas y los precios de la competencia. En el siguiente punto podrás definir todo esto.
4. Haz un plan de negocios para tu restaurante
De la misma manera que las recetas te brindan una hoja de ruta para preparar un plato delicioso, el plan de negocios de tu restaurante es la receta que seguirás para que tu negocio sea un éxito.
Este plan es un modelo que describe en detalle cómo tomará forma y operará el negocio una vez que las puertas estén abiertas. Si es la primera vez que elaboras un plan de negocios de restaurante, vale la pena solicitar la ayuda de un asesor de confianza o un mentor de restaurante.
En última instancia, escribir un plan de negocios consiste en pensar y responder preguntas sobre tu futuro restaurante. Las preguntas te obligan a analizar el mercado, definir la viabilidad de tu idea y prever los desafíos que podrías enfrentar.
Aquí te dejamos las 10 preguntas más importantes que debes responder como parte del proceso de planificación comercial para tu futuro restaurante: ¿Qué tipo de restaurante quieres tener? Resume el concepto de tu restaurante en una frase corta. Esto se conoce como elevator pitch y describe de una forma básica y resumida el trabajo o los proyectos que vas a realizar. ¿Para quién es tu restaurante? Esta pregunta se refiere al grupo de personas a las que quieres recibir en tu restaurante. Recuerda que no puedes complacer a todo mundo, así que enfócate en un nicho. ¿Quiénes son tus competidores? Esto te ayuda a comprender contra quién estás compitiendo (directa o indirectamente), cómo otros restaurantes son similares o diferentes al tuyo y cómo puedes ganar participación en ese mercado. ¿Dónde estará ubicado su restaurante o cuáles serán sus canales de venta? No sólo se refiere a ubicarte en una zona estratégica. Recuerda que un restaurante no necesariamente tiene que tener un local, en los últimos años el concepto de la cocina fantasma ha cobrado mucha popularidad. ¿Cuál es tu propuesta de valor? Este punto es fundamental para comunicar a tus posibles clientes por qué deberían visitar tu restaurante o pedir tu comida. ¿Cómo encontrarán los clientes tu restaurante? Este punto está profundamente relacionado con el nicho y el concepto. Quizás tu nicho encuentra restaurantes en Instagram o quizás se trata de turistas que revisan tus reseñas en TripAdvisor. Tienes que estar donde puedan encontrarte. ¿Qué recursos necesitará tu restaurante? Tómate el tiempo necesario para enumerar todos los gastos únicos (como equipamiento y mobiliario) y los gastos recurrentes (como servicios y salarios) en los que es probable que incurras. No dejes nada fuera. Si calculas mal tus costos perderás dinero. ¿Cuál es tu plan de contratación? Piensa en los roles más importantes dentro de tu staff y cómo procederás a capacitarlos. ¿Cómo ganará dinero tu restaurante? Tu modelo de negocio determina cómo tu restaurante generará ingresos, cubrirá los gastos y, finalmente, ganará más dinero del que gasta. Nuestra recomendación: el Business Canvas Model. ¿Cuánto tiempo le tomará a su restaurante obtener ganancias? Haz un pronóstico de ingresos para determinar cuánto tiempo te llevará recuperar tu inversión inicial, alcanzar el punto de equilibrio y operar un negocio rentable.
5. Valida tu idea antes de abrir
Una buena manera de probar si tu idea de restaurante tiene potencial de éxito es hacer una prueba. De hecho, muchos dueños de restaurantes bolivianos comenzaron haciendo entregas a domicilio o vendiendo en un food truck antes de invertir en un local fijo, contratar personal y comprar todos los equipos.
Soñar en grande está bien, pero comenzar en pequeño es una decisión inteligente. De esta manera, puedes tener una prueba de concepto sólida, construir una base de clientes habituales y saber si tu idea es verdaderamente rentable.
A continuación te presentamos algunas ideas de negocio que, aunque parecen pequeñas, te permitirán generar el capital necesario para financiar un crecimiento sostenido de tu negocio.
Restaurante “pop-up”
Fugaces e itinerantes, su existencia tiene fecha de caducidad y su localización va cambiando. Precisamente en estas características reside su encanto, así como en el factor sorpresa. En algunos de ellos, los detalles sobre la ubicación y el menú se mantienen ocultos hasta el final, agregando un plus de misterio a la velada.
Este concepto nació en las calles de Nueva York y Londres. Una de las ventajas que ofrece este modelo de negocio es que puedes elegir cualquier locación que te parezca interesante: galerías de arte, garajes, pasajes, e incluso el jardín o la terraza de tu casa.
Food truck
Si eres boliviano/a sabes que nos encanta comer en la calle. La comida callejera es una parte importante del movimiento gastronómico en el país. Así que comenzar tu idea de restaurante con un food truck es ideal si no tienes mucho capital.
Este concepto de negocio otorga grandes beneficios al requerir una menor inversión y la posibilidad de ubicarlo en aquellas zonas con mayor afluencia de personas como lo son las zonas de oficinas, comerciales o universitarias.
Dark kitchen o cocina fantasma
Las compras de comida a domicilio ya son parte del día a día de millones de personas que, debido al confinamiento de los últimos años, han tenido que optar por esta forma de consumo. Bolivia no es una excepción, pues ha visto un boom en empresas de delivery.
Las dark kitchens son instalaciones de cocción que producen alimentos solo para la entrega a domicilio sin áreas de comedor. Literalmente puedes empezar a cocinar en tu casa y ver si la gente tiene interés en tu menú y concepto.
Si quieres saber más acerca de este tipo de restaurante en Bolivia, te recomendamos leer este blog con todos los detalles y consejos que necesitas.
6. Establece tu restaurante de forma legal
Muchos negocios en Bolivia inician de manera informal para evitar la burocracia y para no tener que pagar impuestos. Hasta este punto, es probable que puedas operar de esa manera si tienes un food truck o un dark kitchen.
Sin embargo, si ya validaste tu idea y estás listo para abrir un restaurante, es hora de que te vuelvas un negocio formal que facture sus ventas. Incluso para usar servicios como PedidosYa, necesitas al menos un registro de comercio y un Número de Identificación Tributaria (NIT).
Si quieres saber qué trámites y en qué orden debes hacerlos, encontrarás esa información en nuestra Guía para emprender en Bolivia en 2022 (en el tercer apartado). Básicamente, debes: Elegir el tipo de empresa Registrar tu negocio en Fundempresa (ahora SEPREC) Registrar tu negocio en Impuestos Nacionales Tramitar tu Licencia de funcionamiento Asegurar a tus empleados en la Caja Nacional de Salud Registrar tu negocio en las AFPs Registrar tu negocio en el Ministerio de Trabajo
Además, es posible que debas considerar otras licencias específicas para el rubro de los restaurantes. Así que asegúrate de contar con un asesor legal, un contador y un asesor de restaurantes para conocer todas las normas que debes cumplir.
7. Define qué equipos, insumos y tecnología necesitarás
Mientras haces los trámites para establecer tu negocio de manera formal, puedes comenzar a materializar tu idea. En este caso, puedes ir contactando proveedores para equipar tu cocina, proveedores de alimentos y proveedores de tecnología para administrar tu restaurante.
Cada restaurante necesita el equipamiento adecuado. Además de unidades de refrigeración y equipo de cocina, dependiendo de tu menú, es posible que también necesites equipos especializados, como hornos de piso para pizza, freidoras de pollo o parrillas para carne. Estos equipos pueden ser costosos, por lo que debes ser estratégico al seleccionar qué comprar y qué alquilar.
Por otro lado, debes asegurarte de contar con un proveedor de insumos de calidad. Desde productos frescos hasta empaques para llevar. En este caso es recomendable tener varios proveedores. Muchos dueños de restaurantes bolivianos aseguran que algunos son incumplidos, así que es bueno tener otras opciones.
Finalmente, para gestionar tu contabilidad, la facturación, los horarios de los empleados y el procesamiento de pagos es necesario que pienses en algún software o herramienta tecnológica que haga estos procesos más sencillos. Hacerlo de manera manual puede ser un caos. Algunas opciones bolivianas: TuGerente y RestoTech.
8. Encuentra una ubicación para tu restaurante
La ubicación de tu restaurante tiene que hacer sentido para tu nicho y tiene que ir con el concepto elegido. Por ejemplo, con un concepto natural, hace sentido que esté ubicado a las afueras de la ciudad. Y con un concepto sofisticado y moderno, hace sentido que esté ubicado en un barrio exclusivo.
Al elegir una ubicación para tu nuevo restaurante, estos factores son los más importantes:
Visibilidad y accesibilidad: elige una ubicación con buena visibilidad que reciba mucho tráfico de personas. Considera la disponibilidad de estacionamiento y la facilidad de acceso para automóviles y peatones. Demografía: el nicho de tu restaurante debe frecuentar el área, ya sea que viva, trabaje o estudie cerca. Competencia local: como dijimos antes, puedes aprender mucho observando los restaurantes que compiten en tu área. La clave es elegir un lugar donde restaurantes similares tengan éxito, pero evita un barrio que esté saturado de restaurantes que compitan directamente con tu concepto. Costo: Un lugar más céntrico tendrá un precio de venta o alquiler mayor que un local en una zona más alejada. Además, los locales céntricos suelen ser más pequeños.
En un inicio, te recomendamos alquilar un espacio para tu restaurante. Esto te permitirá más flexibilidad si decides expandirte y trasladarte. También es importante evaluar el tamaño y la forma interior para distribuir los espacios.
Además del espacio del comedor, en el cual tus clientes deben sentirse cómodos y a gusto, no debes olvidar que el restaurante debe contar con un buen espacio de cocina. Así el personal de cocina será más eficiente, reducirás los riesgos de sufrir accidentes, y tendrás suficiente espacio para almacenar tus insumos.
9. Define cuantas personas y qué roles necesitarás contratar
Haz una lista de todos los puestos de restaurante que necesitarás cubrir para operar tu restaurante diariamente. Considera cuántos días estará abierto durante la semana y cuántos turnos trabajarán cada día.
Es importante pensar en los beneficios de los empleados, el programa de capacitación y los incentivos para incrementar tu retención de empleados. Si construyes una buena cultura desde el principio, no tendrás que sufrir tratando de conseguir personal a última hora para llenar una vacante.
Los requisitos de personal variarán según las necesidades únicas de tu nuevo restaurante, pero estos son algunos de los puestos más comunes:
Equipo de administración: gerente general, gerente de cocina, gerente de recepción. Personal de cocina: jefe de cocina, sous chefs, cocineros de preparación, cocineros de línea, lavaplatos. Personal de recepción: meseros, anfitriones, corredores de comida, ayudantes de camareros. Personal del bar: camareros, barbacks, bartenders.
También es posible que tengas que contratar empleados como expertos en marketing, especialistas en relaciones públicas y contadores.
Recuerda que tu staff de cocina no solo debe contar con una buena sazón, sino también debe tener la flexibilidad suficiente como para adaptarse al estilo del menú que quieres para tu restaurante. O contratar cocineros que se especialicen en el tipo de comida que vas a servir.
10. Haz correr la voz
Ya casi tienes todo listo. Ahora necesitas que tus posibles clientes se enteren de que estás abriendo un nuevo restaurante y que quieran ir a conocerlo. Si eres como muchos emprendedores bolivianos, ya tendrás una base de clientes de tu food truck o dark kitchen. Sin embargo, abrir un restaurante te permite llegar a nuevos clientes.
Antes de inaugurar tu restaurante, es importante que hagan un plan de marketing básico. Tus objetivos deben ser generar conciencia y expectativa sobre la gran apertura. Y debes priorizar los canales en los que tienes la mayor probabilidad de interactuar con tu nicho.
La publicidad brinda información básica sobre su restaurante para que los posibles clientes sepan dónde se encuentra y qué sorpresas tienes preparadas. A continuación, te dejamos algunos consejos para difundir tu restaurante:
Usa las redes sociales: hoy en día, la presencia en las redes sociales es una necesidad absoluta para los restaurantes. Crea cuentas de Facebook, Instagram o TikTok de acuerdo a tu nicho y comparte fotos y videos de tus mejores platos. No olvides incluir siempre la ciudad, la dirección y los horarios de tu restaurante en un lugar visible. Crea una cuenta de TripAdvisor o Google My Business: registrarse en estos sitios facilita que la gente te encuentre cuando busque lugares en Google. El hecho de que los comensales puedan dejar reseñas de su experiencia, aumenta tu autoridad y atractivo (si son positivas). Recuerda que la mejor publicidad es lo que tus clientes dicen de ti. Haz una campaña de expectativa para la gran inauguración: muestra pequeñas pistas de lo nuevo en tu menú y del ambiente, haz un conteo regresivo y piensa en un estímulo para que la gente quiera ir como algún regalo, descuento o promoción.
Organiza un “soft-opening” y una gran inauguración
Esta es una “yapita” para terminar el blog. Todos sabemos lo importante que es el primer día de apertura oficial de un restaurante para impresionar a sus clientes. Sin embargo, si quieres reducir la cantidad de errores y prepararte mejor para el gran día, puedes hacer una inauguración previa o “soft-opening”.
La idea es invitar a los amigos de la empresa para una primera degustación no oficial. Tu lista de invitados puede incluir a amigos, familiares, vecinos y representantes de tus proveedores.
Esta será la primera vez, fuera de la capacitación, que el personal del restaurante trabajará en conjunto como si fuera un turno real. Los restaurantes suelen invitar a amigos y familiares a esta pre-apertura porque tienden a ser más indulgentes cuando ocurren errores y entienden que todavía estás comenzando.
Aquí hay algunas ideas que puedes aplicar en este evento privado: Menú de prueba: ofrece un menú de muestra con un número limitado de opciones. Reduce el estrés del nuevo personal y alienta a tus invitados a regresar para ver el menú completo. Horario limitado: puedes operar con un horario limitado durante los primeros días de apertura.
Después de esa pre-apertura, puedes abrir de manera oficial con un evento público. Es completamente normal que todavía haya problemas para resolver o errores que ocurren sobre la marcha, pero ahora te sentirás mucho más confiado/a.
¡Suerte!
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